Hola, al habla Flordeverano! Hoy os traigo la reseña de un libro que leí
hace una semana (y ya se empieza a difuminar en mi memoria… mala señal). Espero
que os guste:
Título: Pero a tu lado
Autor: Amy Lab
Editorial: Alfaguara
Encuadernación: Rústica con solapas
Nº Páginas: 544
Precio: 15,50€
ISBN: 9788420414638
SINOPSIS: Álex es una estudiante de segundo de Bachillerato. Es divertida,
inteligente y tiene muchos amigos. Pero su vida amorosa no está al mismo nivel.
En realidad, ha sido bastante decepcionante hasta el momento, así que este año
Alexia ha decidido centrarse únicamente en sus estudios. Claro que no contaba
con la llegada de Oliver, su desconcertante nuevo vecino. Oliver es realmente
atractivo —como su amiga Gaby se esfuerza en recordarle—, pero de una manera
salvaje que inquieta a Álex. Oliver es duro y distante hasta la insolencia
pero, a través de esas visitas inesperadas por la terraza de su habitación,
Alexia descubrirá también a un joven tierno y pasional cuyo misterio los
llevará al límite.Y es que, a veces, el verdadero misterio, aquello que hace fascinante
nuestras vidas, está más cerca de lo que pensamos…
-Todo sería más
fácil si te apartara -me dijo.
-¿Y por qué no
lo haces?
-No lo sé...
-respondió finalmente-. No lo sé... -repitió más bajo acercando tanto su cara a
la mía que podía respirar su aliento-. No lo sé... -susurró de nuevo apoyando
su frente contra la mía.
Me oí a mí
misma tragar saliva y sentí que él hacía lo mismo. Tenía los labios
entreabiertos, esos carnosos labios que me atraían como si de un imán se
trataran. Iba a besarme, lo sabía, y deseaba que lo hiciera con todas mis
fuerzas. La oscuridad alcanzó su rostro. Ya no podía verlo. [...]
RESEÑA: ¿Alguna vez
habéis leído uno de esos libros, que a pesar de tener una trama mediocre y unos
personajes mediocres, os mantienen enganchados hasta la última página? Esta es
una de esas novelas.
Cuando empecé a leer “Pero a tu lado” sabía dónde me metía. No esperaba
encontrarme la historia del siglo, solo algo ameno y que me entretuviera un
rato. Mis expectativas eran bajas, y creo que eso ha sido lo que me ha
permitido disfrutar bastante de la lectura, a pesar, de haber momentos que no
he podido evitar soltar algún que otro resoplido (y eso que iba preparada…)
El hilo argumental es simple y bastante predecible: Alexia conoce a Oliver,
Alexia odia a Oliver (claaaro… *insertar aquí ironía*), Oliver esconde un
oscuro pasado, Alexia se siente tan atraída hacia Oliver (*Rápida aclaración:
el aspecto del chico, es algo así como una mezcla de Superman y un Dios
griego), Oliver actúa como un capullo, Alexia le perdona, Oliver la vuelve a
cagar, Alexia le perdona, Alexia quiere saber cosas sobre la turbulenta
historia de Oliver, Oliver vuelve a ponerse en modo imbécil… Alarga esto por
500 páginas, y… ¡voila!
Seamos sinceros, cuando leí en la sinopsis ya sabía dónde me estaba
metiendo, pero aun así, quería misterio, quería giros argumentales, quería
acción e intriga. Pero en vez de centrarse en todas estas cosas, las autoras
han preferido describirnos repetidamente lo perfecto que es Oliver y su cuerpo
tan escultural; hasta que llega un momento, que la supuesta incógnita, queda
totalmente eclipsada por las idas y venidas de Oliver y Alexia, las cuales no
me podían importar menos.
-Para ti todo es muy evidente y muy fácil, pero es que no tienes ni idea. Tú no sabes lo que es sentir algo fuerte por alguien. Con ese rollo tuyo de la libertad y de que no hay que pedir cuentas a nadie… Eso no es querer. Cuando quieres a alguien, luchas por estar a su lado a cada momento y no importan los obstáculos ni la distancia. Cuando quieres a alguien, no puedes soportar la idea siquiera de que esté con otra persona y te duele si eso ocurre. Aunque a veces te saque de tus casillas o te enfade o te haga daño, esa persona se vuelve irremplazable, no entiendes la vida sin ella y el mundo se hace inhabitable si no está a tu lado. Si quieres de verdad, lo haces con el alma, sin pedir nada a cambio, ni siquiera ser correspondido.
Comenzó a aplaudir.
-Casi me has emocionado. Precioso discurso. Peliculero y poco realista, pero bonito.
Alexia es la protagonista y la narradora de la historia. Si soy sincera hay
veces que quería tirarme de los pelos con ella.
Empieza la historia y nos asegura que está enamorada del novio de su mejor
amiga, cada tres páginas lloriquea un poco por esto, se queja de lo horrible
que es todo y demás. Pero cuando vuelve a ver a Álvaro (el ya nombrado novio),
prácticamente se lanza a sus brazos. Y siempre acaba sacando una excusa para no
ser ella la que se lo diga a su amiga (Si de verdad la aprecias tanto como
dices, lo mínimo que puedes hacer es contarle lo sucedido, en vez de quedarte
llorando en tu cama).
Luego llega a su vida el maravilloso Oliver, ella se siente atraída, saltan
chispas y… Bla, bla, bla. Y aquí es donde empiezan mis verdaderos problemas con
Alexia, y es que de verdad no entiendo cómo puede permitir que su vecino juegue
con ella en todo momento. La deja tirada, la responde de malas maneras, no
confía en ella, la da evasivas… y aun así, cuando ella va a reprocharle algo,
él la besa y se olvida hasta de su nombre. Simplemente odio este prototipo de
protagonistas femeninas, que pierden la cabeza cuando el chico se acerca a
menos de un metro, Alexia deja que Oliver la trate como basura durante más de
la mitad del libro. Pero está bien, porque con que de vez en cuando tenga el
mínimo gesto con ella ya lo compensa todo. No. Simplemente no.
En cuanto a Oliver. No le he soportado. Sí, tiene sus escenas de “Oh, que
mono”, pero no apoyo su actitud, ni su comportamiento. Vale que ha tenido una
vida complicada y un pasado difícil, pero eso no le da derecho a tratar al
resto del mundo fatal, porque han tenido mejor suerte que él.
“¿Qué quieres?
¿Qué te pida perdón? ¿Qué me disculpe por haber tenido una madre y un padre que
me quieren, por no tener un abuelo que me haga la vida imposible, por no haber
pasado dos años en un psiquiátrico? Tú no tienes la culpa de lo que te ha
pasado, pero yo tampoco de que mi vida haya sido, como dices tú “tan fácil”
Eso resume perfectamente mi opinión. Y es que Oliver, en cierto punto echa
en cara a Ale, el haber tenido una familia. WTF?
La verdad, si me encontrará a un chico como él, lo primero que haría salir
corriendo. No entiendo el tópico, que ahora se explota un montón, de chico
malo- chica buena. ¿Qué tienen de malo los chicos normales, qué no esconden un
pasado oscuro? La gente no se reforma por amor, no cambia de golpe su forma de
vida, porque ha conocido a una chica.
El resto de personajes secundarios brillan por su mediocridad, excepto Gaby
que se nos pinta como la amiga atrevida y lanzada, el resto son totalmente
planos. ¿Pero por qué intentar hablar de ellos, cuando podemos seguir gastando
palabras para describir el increíble aspecto de Oliver? ¿Por qué intentar
darles algo de profundidad al reparto del libro? Claramente es mucho más
interesante centrarnos en el culebrón que es la vida de este chico y en como, a
pesar de ello, consigue ser tan guapo como un modelo.
El estilo de escritura de las autoras, no me ha parecido nada del otro
mundo. El libro está sobretodo formado por diálogos, así que en general se lee
bastante rápido.
En resumen: Una lectura que no destaca. Con dos personajes algo
insoportables y bastantes tópicos. Solo se la recomiendo a aquellos que sean
grandes fans de las relaciones de tira y afloja, y de los romances
contemporáneos.
LO MEJOR: Algunos diálogos.
LO PEOR: Alexia.
UN MOMENTO:
-¿Me estabas besando?
-¡Yo! -«niégalo, niégalo, niega lo evidente, Alexia»-. ¡Ja! Más quisieras
-«Dios, qué vergüenza, que me trague la tierra ya».
-Me estabas besando –aseveró con una sonrisa socarrona.
-Pero si estabas medio dormido.
-O sea, que lo admites.
-¡No admito nada! Digo que, como estabas dormido, habrá sido que tu mente
te ha jugado una mala pasada.
Se rio. Yo no tenía la culpa, fue una pulsión irrefrenable y esa voz que me
animaba a hacerlo… Y pensé que él me estaba respondiendo. Dios, qué vergüenza.
Pero, claro, si había comenzado mi argumento negándolo todo, ahora no podía
cambiarlo.
-Me voy a mi casa –dije mientras me dirigía hacia las escaleras.
-¿Y vas a saltar en albornoz?
-Saltaré como me dé la gana.
-¿Otro beso de buenas noches? –casi no pudo terminar la frase de la risa.
-Que te den.
CONCLUSIÓN:
NOTA: 5'5/ 10